5 errores de decoración que te harán no vender tu casa. Vender una cosa es algo muy complicado y laborioso, pero cuando lo consigues, ¡oh! Qué placentero es.
Para aligerar este proceso y que sea realizado de la forma más rápida posible, es imprescindible ser un poco más cuidadoso a la hora de llevar a cabo la venta.
Lo que puede complicarnos esta labor es una mala o pésima decoración. Si pretendes vender tu propiedad, no puedes, bajo ningún concepto, cometer alguno de los errores que te planteamos a continuación, sino la casa te perseguirá durante mucho tiempo. ¡Más del que imaginas!
¿Qué hacemos mal a la hora de decorar una casa para sacarla al mercado?
– Pensar que decorar de forma personalizada va a enamorar a los clientes. Esta premisa es completamente falsa pues si ven elementos muy íntimos de los anteriores propietarios, huirán sin medida de la vivienda. Una propiedad con excesiva personalidad también echa atrás, ¡y mucho! Lo mejor es decorar con complementos neutros y con toques minimalistas, para que los compradores puedan verse viviendo ahí sin necesidad de mucho. ¿El resto? Lo pondrán ellos, por supuesto.
– Disimular desperfectos. Tapar manchas, cubrir un elemento roto o similar es lo peor que podemos hacer. A la larga, todo sale, como bien sabrás. Si tratas de hacer pasar desapercibido algo defectuoso de tu vivienda meterás la pata seguro. Asegúrate de arreglar todo lo que haya en mal estado antes de poner a la venta la casa. Con esto evitarás futuros malentendidos, además de que es una mínima inversión que saldrá rentable seguro.
– Malos olores, lo que peor nos puede ocurrir. Que visitemos un inmueble y el olor nos eche atrás nos ha pasado a todos. El olfato es el sentido más poderoso que tenemos y el que toma muchas decisiones sin darnos cuenta. Lo que conquista a los clientes potenciales es el olor, así que presta atención a ello y no descuides tu casa. Apuesta por aromas neutros y de fragancias poco agresivas. Algodón, vainilla o aire limpio son los más indicados.
– Los colores estridentes no gustan a todos. Creer que si apostamos por tonos llamativos vamos a conseguir llamar la atención es algo cierto, pero hacia pensamientos negativos y compras nulas de la vivienda. Las visitas quieren ver armonía, colores que les transmitan relax y tranquilidad en su futuro hogar, y no tonos que les resulten incómodos y muy agresivos a la vista. Para toques de color intenso, lo mejor es hacerlo en pequeñas dosis, un complemento, un tejido o un cuadro de menor tamaño.
– Finalmente, no olvides prestar atención a la entrada de la casa, la primera impresión que todos van a tener de la vivienda, ¡y la más importante! Para este espacio, no caigas en la tentación de ser demasiado ansioso por vender la casa y quieras ser muy estridente. Algo simple como un espejo y un mueble auxiliar serán más que suficientes. Colores armonizados, líneas simples y algún detalle floral será lo justo y necesario para enamorar a los clientes potenciales.
En inmoTP te podemos asesorar para que no caigas en estos errores. Confía en nosotros y te sorprenderás!!!
Fuente: habitissimo